- ¿Cómo empaquetar una casa entera?
Sigue un orden. Guarda cada habitación por separado y marca cada caja con el nombre de lo que corresponda (Objeto y habitación). No olvides hacer inventario. Y si no quieres que nada se rompa por el camino, consigue papel periódico o un rollo de papel de burbujas o sábanas viejas, para envolver los objetos más delicados.
- Momento desmontar los muebles
Ante todo, no pierdas ninguna pieza. Mete los tornillos y las piezas pequeñas de cada mueble en bolsas de plástico, especificando el mueble del que se trate. Y si la cosa se complica, haz un croquis. Así, será más fácil montarlo de nuevo.
- Momento de la furgoneta.
Aprovecha bien el espacio. Primero carga los muebles más grandes, después las cajas más pesadas, de forma que aseguren los muebles, y las cajas más ligeras colocarlas sobre las otras o sobre el mobiliario. Ve rellenando con las piezas sueltas y asegúralas con cuerdas, para que no se caiga nada. Un consejo: Ponte ropa cómoda y holgada, que te permita libertad de movimientos y no cargues cosas muy pesadas, si no deseas ver sufrir a tu cuerpo. Mejor, más viajes con menos peso.
- Momento “casa nueva”
Por fin, llegas a tu nuevo hogar, aunque hay tanto bulto que no sabes por dónde empezar. ¡Tranquila! Respira y comienza. Ideal que todo quedando arrumado dependiendo de la ubicación. Primero, monta los muebles, después, desbarata las cajas, procura ir doblándolas al mismo tiempo para que ocupen menos espacio, y por último, enchufa la nevera.
- Momento “colocar”
Para que la cosa prospere y no te pases días y días con la casa patas arriba, empieza colocando las cosas de la cocina y el baño (al quitarte un número importante de cajas, te vas animando). Después, las habitaciones y termina con la sala, que es, normalmente, la estancia donde más hay que colocar. Prosigue luego con los demás detalles (Aspectos decorativos)